top of page

Ya se bajo que coordenadas ubicar mi energía... ¿Cómo redireccionarla para ponerla a mi favor?

Por ir cerrando temas, si lo recuerdas en mi último post cuando me referí a las coordenadas que sigue el flujo de nuestra energía, tras presentarte las cuatro opciones que podrían darse en cualquier escenario que analizásemos, al final te comentaba que además de conocerlos, y así poder detectarlos, era importante aprender a redireccionarlos, caso que nuestro lugar de partida no fuese el más idóneo.


Vuelvo a hacer hincapié en el "lugar de partida" porque toda coordenada que nos ayude a descifrar un mapa siempre tiene dos extremos: hacía dónde voy y de dónde parto. En el ejemplo que usé el otro día mi lugar de destino era Madrid saliendo desde Granada, lugar en el que ahora me encuentro, pero si ese fuese mi destino encontrándome ubicada en Lugo por ejemplo, ¿Las coordenadas a seguir con el GPS de mi coche serían las mismas?... obvio que no ¿Verdad?. Como no deja de ser obvio también dentro del mismo ejemplo, que a mi GPS tendría que decirle no sólo que quiero ir a Madrid, también tendría que decirle que me encuentro en Granada para que me calcule la ruta más favorable. Es decir, los dos puntos son una referencia a tenerse en cuenta. Lo recalco una y otra vez porque los "desde dónde" - introspección no son del agrado de nuestros egos y como yerre el tiro en esa coordenada, aún yendo con GPS me voy a hartar de dar vueltas antes de llegar a destino.


Y muchas veces cuando toca sondear las energías que nos habitan y rodean, el punto de partida, no siempre es tan evidente como parece. Y no lo suele ser porque operan en nosotros de forma inconsciente más veces de las que podamos imaginar. Entre otras cosas porque no nos enseñan ni a sondearlas ni a comprender la importancia de hacerlo. Por eso quise ponértelo en valor. Recordándote de paso al hacerlo, que no eres solo un cuerpo y una mente, con una serie de pensamientos y emociones... también eres energía. Y al igual que tu mente o tus emociones pueden jugar a tu favor o a tu contra, con tu energía ocurre lo mismo.


Ahora para que aprendas a ponerla a tu favor voy a comentarte cómo poder redireccionarla, pero esta vez mostrándote como actuar frente a "un otro" en el contexto de una situación que te preocupe. Algo que te resultará de mucha utilidad cuando hayas aprendido a controlar tus flujos internos y ya como Mercader estés abocado a salir al mundo desenvolviéndote desde los parámetros que te definieron como Guerrero. Recuerda no caer en la tentación de usar estas estrategias para beneficiarte de las situaciones al antojo de tu "Yo" antes de que llegue ese momento. Eso equivaldría a manipular no a reubicar.


Fuerza cero o pasiva: Cuando la energía se queda estancada la estrategia pasa por semblantear la situación, me transformo en un espejo de esa situación, es decir, si percibo indiferencia en el otro yo me muestro indiferente. Imagina que has tenido un desencuentro con alguien y esa persona te muestra frialdad y os habéis quedado en punto muerto. Semblantéale mostrándote igual de frio. Esta estrategia por absurda que parezca es una de las más empleadas en negociaciones empresariales, en muchos Serclas previos a huelga en mi etapa de mediadora sirvió para acercar posturas y que las partes implicadas se moviesen hasta el acuerdo.


Fuerza orientada hacia algo: Cuando la energía te muestra que en la situación el interés del otro se dirige hacia un lugar diferente al tuyo, la estrategia pasa por estimular, hago lo que esté en mi mano para que ese otro siga dirigiéndose hacia aquello que le interesa hasta que se agote. Imagina ahora que tienes un desencuentro con alguien porque esa persona prefiere pasar más tiempo con sus amigos que contigo, estimúlala para que pase todo el tiempo que pueda con ellos. Verás como se cansa más pronto que tarde.


Fuerza activada pero no orientada: Cuando la energía te muestre que en la situación hay un interés latente pero la otra parte no sabe hacia dónde dirigirlo, la estrategia pasa por derivar. Imagina que la persona del ejemplo anterior finalmente se agotó de la compañía de sus amigos y por fortuna para ti te busca porque tiene intención de salir el finde contigo pero no sabe qué proponerte. Si lo que te apetece es ir al cine deriva su interés - contándole el gran éxito de taquilla que esta resultando ser la peli que quieres ver, por ejemplo- para que te acompañe.


Fuerza contraria: Cuando la energía te muestra que en la situación el interés del otro es claramente contrario al tuyo, la estrategia pasa por invertir, es decir, tengo que hacerme con otra fuerza en contra que haga de contrapeso en la situación. Imagina por último que esa persona que te vuelve a buscar lo hace con la intención de que la acompañes a cenar cuando tu interés es salir pero al cine como antes vimos. Invierte la situación poniéndote en contra de tu interés diciéndole que no tienes intención de salir. Así estarás abriendo la puerta a que para convencerte y que salgas, acepte tu plan alternativo.


Dicho esto, ahora el reto para ti es pasar a la acción poniendo en práctica estas dos últimas reflexiones. Sólo así podrás entrenarte en el arte de la conocida también como "acción vacía" y comprobar su utilidad y eficacia. Si lo haces, con la práctica constatarás que no es algo tan complejo como pudiera parecernos en un principio. La clave está en permanecer muy atento-presente-vacío de acción, mientras detecto qué fue lo que densificó la energía.






bottom of page