Cuando nos disponemos a equilibrar nuestras emociones, con un alto índice de probabilidad lo que va a ocurrir es que comiencen a aflorar "sensaciones de dolor" que nos causan un gran sufrimiento, de ahí que se produzcan muchas deserciones durante el proceso de liberación emocional cuando se recorre el camino de la sanación interior. Si te fijaste entrecomillé -sensaciones de dolor- para que advirtieses que a eso a lo que solemos llamar dolor en la mayoría de los casos debiéramos llamarlo sufrimiento, por tratarse de términos que en sí mismos no son sinónimos. Y me explico mejor.
Mientras que el dolor es una percepción localizada que puede ser más o menos intensa, molesta y/o desagradable en una parte del cuerpo, cuya finalidad es adaptativa por aquello de avisarnos de que algo anda mal en nuestro organismo a nivel físico, el sufrimiento por su parte es el padecimiento, la pena o el dolor emocional que experimentamos desde nuestro psiquismo, al tratarse de una sensación consciente o inconsciente, que aparece reflejada en forma de padecimiento o infelicidad... cuya finalidad... y atiende bien aqui... no siempre es adaptativa... porque una cosa es que me duela una pierna si me la he roto y el dolor me avise y otra muy distinta que sufra y padezca imaginándome que sería de mí.. si mi mayor miedo, ese que vivo desde la mente, sale de ella y adoptando forma en el mundo me agarra, algo que por cierto a priori no se si me pasara o no. ¿Ves la diferencia?.
Y teniendo en cuenta lo hábil que puede llegar a ser la programación mental de nuestro "yo" para mantenernos enroscados en el sufrimiento, prepárate para pasarlo mal mientras no te detengas a desalojar de tu psiquismo todas esas "sensaciones de dolor" que te causan tanto sufrimiento desde la mente. Paradójico eso de permanecer en el sufrimiento por no querer sufrir mientras lo soluciono .¿No te parece?
Pero, y ojo aquí, ¿Podría ser que la que me esté enviando señales de sufrimiento sea mi alma en lugar de mi mente? ¿Mi alma podría llegar a sentir dolor? Las preguntas se las traen ¿Verdad? Como por esta vía no puedo llegar a conocer cual es tu opinión al respecto, voy a trasladarte la mía por si te resulta de utilidad contemplarla. Desde el proceso de sanación que yo experimenté te diría que a nuestra alma le pueden llegar a doler muchas, pero que muchas cosas, que sentirá dolor - a veces proyectado incluso en tu cuerpo físico- cada vez que traiciones el propósito por el cual encarnaste y te desatiendas dejando de ser fiel a tu esencia mientras empañas por tus miedos la luz que eres.. Y empleé el término "doler" para matizarte que este dolor es incluso más adaptativo que el dolor físico de cuando te duele una pierna rota... al tratarse de un llamado que te hace tu Ser para que puestos a liberar emociones, comiences por las que están machacando a tu espíritu y aniquilando a tu alma.
Comentarios